Entra | Regístrate

Me llamo Natacha y mi nombre rima con mancha. Creo que es una señal, porque siempre, siempre, siempre las manchas me acompañan: cuando escribo con tinta, cuando cocino remolacha, cuando tomo mate y cuando camino descalza. Mis cuadernos se manchan, mis manos se manchan, mis rodillas se manchan, y de esas manchas nacen cuentos, como el de este niño, que juega con los molinos de viento.